El universo podría estar engañándonos con sus ilusiones ópticas.
La primavera pasada, los investigadores descubrieron una gran abundancia de tres elementos en un grupo de gigantes rojas (estrellas moribundas en la última etapa de su evolución) a menos de 3 años luz de distancia del agujero negro en el centro de nuestra galaxia, la Vía Láctea. Los altos niveles de estos elementos (escandio, vanadio e itrio) desconcertaron a los astrónomos, que trataron de explicar el fenómeno con varias teorías. Una teoría sugirió que los niveles anormalmente altos de los elementos fueron el resultado del descenso de estrellas viejas al agujero negro, mientras que otra postuló que los elementos eran escombros de la colisión de estrellas de neutrones, según un comunicado.
La última de tales explicaciones fue propuesta recientemente por un grupo internacional de astrónomos y físicos atómicos. Argumentan que esos elementos en realidad no existían a las altas concentraciones observadas. Más bien, los elementos fueron probablemente una ilusión todo el tiempo, informaron los investigadores en un nuevo estudio publicado ayer (10 de octubre) en el Astrophysical Journal.
Los científicos detectaron originalmente estos elementos registrando "líneas espectrales" con un espectrómetro. Con este método, los científicos observan la cantidad de luz que absorbe o emite un objeto. Debido a que diferentes elementos emitirán o absorberán luz de una manera ligeramente diferente (llamadas sus líneas espectrales), los científicos pueden usar la información para descubrir de qué está hecho un objeto. El escandio interactuará con la luz de manera diferente a, por ejemplo, el vanadio, por ejemplo.
Los científicos que realizaron la nueva investigación encontraron líneas similares de escandio en gigantes rojas en nuestro propio vecindario solar. Sin embargo, los autores encontraron que si el gigante rojo estuviera por debajo de cierta temperatura, esas líneas espectrales aumentaban en fuerza. Pero esto no significa que haya más escandio, vanadio o itrio en la estrella, dijeron.
En cuanto a por qué la temperatura afectaría las mediciones, los investigadores sugirieron que los electrones que forman los átomos de estos elementos se comportan de manera diferente a temperaturas más bajas que a temperaturas más altas, según el comunicado. Entonces, las temperaturas más bajas de los gigantes rojos, que son mucho, mucho más bajas que las de nuestro sol, podrían haber emitido esta ilusión de líneas espectrales, según el comunicado.
Los investigadores sugieren que la gran abundancia de estos elementos no es un fenómeno único en estas estrellas gigantes rojas cerca del agujero negro, sino que es una ilusión en las mediciones. La formación de estas líneas fuertes actualmente "escapa al modelado teórico preciso", escribieron en el estudio.
Llegaron a la conclusión de que esas líneas espectrales no deberían usarse como una medida de estos elementos, "hasta que comprendamos mejor cómo se forman estas líneas", escribieron en el estudio. Los investigadores están haciendo exactamente eso, continúan midiendo líneas espectrales de varias estrellas en la Vía Láctea para comprender mejor de qué están hechas.